¿Hola, cómo están? En esta nueva entrega de Paulina Cocina, vamos a hablar de los alfajores cordobeses, una delicia de la repostería argentina, más precisamente de la Provincia de Córdoba; conocidos por su textura aireada, su cobertura de glasé y su relleno de dulce de fruta o dulce de leche.
¿Qué les parece si en vez de esperar a que esa prima que viajó a Córdoba les traiga una caja de alfajores cordobeses, les pasamos todos los secretos y tips para hacerlos en casa? Además, claro, de la receta de alfajores cordobeses para disfrutarlos como si estuvieran en las hermosas sierras cordobesas. ¡Vayan preparando el mate que se viene la receta!
Tabla de Contenidos
Sobre los alfajores cordobeses
Los alfajores cordobeses son una de las joyas de la repostería argentina. Suaves, dulces cubiertos de un glasé inconfundible, y con una textura mucho más aireada que otros, lo que los hace tan particulares.
Si bien la receta original de alfajores cordobeses es con dulce de fruta, hoy en día se encuentran con diferentes rellenos, como dulce de leche o dulce de batata. Un detalle importante es que estos alfajores serranos no llevan baño de chocolate como los alfajores marplatenses, sino que su principal encanto está en su suavidad y en esa capita de glasé que lo cubre.
El origen y la tradición de los alfajores cordobeses
El nacimiento de los alfajores cordobeses se remonta a la época colonial, cuando los conventos comenzaron a elaborar dulces inspirados en recetas traídas por los españoles. Córdoba, con su tradición repostera y sus monjas con mano santa para el azúcar, vio nacer este manjar que rápidamente se convirtió en un símbolo local.
Pero no fue hasta finales del siglo XIX y principios del XX que la producción de estos alfajores empezó a popularizarse en todo el país. Hoy, hablar de alfajor cordobés es hablar de un souvenir obligatorio después de cualquier escapada a las sierras.
7 Características que amamos de los alfajores de fruta cordobeses
¿Qué diferencia a los alfajores cordobeses del resto? Aquí algunas de sus características principales:
- Masa aireada: A diferencia de otros, los alfajores cordobeses tienen una textura más esponjosa y liviana.
- Glasé crujiente: La cobertura de azúcar y limón es una de sus marcas registradas.
- Relleno de fruta: Aunque hoy se encuentran versiones con dulce de leche, la receta original de alfajores cordobeses lleva dulce de membrillo.
- Aroma a limón y vainilla: La masa suele perfumarse con estos ingredientes para darle un toque especial.
- Tamaño generoso: No son pequeños bocados, sino alfajores con buena presencia.
- Orígenes serranos: Su tradición viene de los conventos y de la producción artesanal de las sierras de Córdoba.
- Un sabor único: Ni demasiado dulces ni pesados, estos alfajores tienen un equilibrio perfecto entre suavidad, dulzura y frescura.
Diferencia entre los alfajores cordobeses y otros alfajores argentinos
Si bien en Argentina hay una variedad increíble de alfajores, los alfajores cordobeses tienen características que los hacen únicos:
- No llevan chocolate: A diferencia de los alfajores marplatenses.
- No tienen una masa quebradiza: Como los alfajores santafesinos.
- Son más aireados: Que los tradicionales de alfajores de maicena.
- La cobertura de glasé: Que distingue a los alfajores cordobeses a simple vista.
- El relleno: Suelen rellenarse con dulces de fruta más que con dulce de leche.
Rellenos tradicionales de los alfajores cordobeses
Si bien la receta de alfajores cordobeses se hace con dulce de membrillo, existen otras variantes deliciosas:
- Dulce de batata
- Dulce de leche
- Mermelada de frutilla
- Mermelada de durazno
- Crema de avellanas
- Crema pastelera con un toque de limón
9 Tips para hacer el verdadero alfajor cordobés
- Usar harina 0000: Para una textura más liviana.
- No amasar en exceso: Para evitar que la masa se endurezca.
- Perfumar con ralladura de limón y esencia de vainilla: Para un aroma más auténtico.
- No cocinar de más: Las tapas tienen que quedar más bien blanquitas. No es necesario dorarlas.
- Dejar enfriar bien las tapas: Antes de rellenarlas para que no se humedezcan.
- El glasé debe estar bien fluido: Dependiendo el clima se puede hacer un glasé real, con clara de huevo, si es un día muy húmedo; o un glaseado simple, con azúcar impalpable, agua y jugo de limón, si el clima es seco.
- Sumergir los alfajores cordobeses en glasé y escurrir el exceso: Para lograr una cobertura pareja.
- Dejar secar el glasé a temperatura ambiente: Sin apurarlo con frío. El verdadero alfajor cordobés necesita su tiempo. Si es posible hacerlos de un día para el otro.
- Guardarlos en un recipiente hermético: Para que conserven su humedad y sabor.
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Receta original de alfajores cordobeses
Rinde: 10/12 alfajores
Tiempo de preparación: 1 hora y 30 minutos (incluyendo el secado del glasé)
Ingredientes
- 300 g de harina 0000
- 100 g de almidón de maíz
- 1 cdita de bicarbonato de sodio
- 2 cditas de polvo de hornear
- 150 g de azúcar
- 2 cucharadas de miel
- 125 g de manteca
- 3 yemas
- 1 huevo entero
- 1 cdita de esencia de vainilla
- Ralladura de 1 limón
- 250 g de dulce de membrillo o de frutas
Para el glasé
- 150 g de azúcar impalpable
- Jugo de 1/2 limón
- 2 cucharadas de agua caliente
Cómo hacer alfajores cordobeses paso a paso
- En un bol colocar la harina tamizada, el almidón de maíz, el bicarbonato y el polvo de hornear. Reservar
- En otro recipiente, batir la manteca a temperatura ambiente (pomada) con el azúcar hasta obtener una crema.
- Agregar las yemas, el huevo entero, la miel, la esencia de vainilla y la ralladura de limón. Batir hasta integrar y que quede bien cremoso.
- Incorporar los ingredientes secos tamizados y unir la masa sin amasar demasiado, solo hasta que quede homogénea.
- Estirar la masa sobre papel manteca o film hasta 1 cm de grosor. Llevar a la heladera por 30 minutos.
- Retirar la masa de la heladera y dejar reposar unos minutos para que sea más fácil de manipular. Cortar círculos de 5 cm de diámetro.
- Colocarlos en una placa enmantecada y enharinada y hornear en horno precalentado a 160-170°C por 8-10 minutos. No deben dorarse.
- Dejar enfriar las tapas completamente antes de rellenarlas con el dulce de membrillo o frutas, procurando que el relleno no se desborde.
- Para el glasé, mezclar el azúcar impalpable con el jugo de limón y el agua caliente. Agregar el agua de a poco hasta obtener la consistencia deseada.
- Bañar los alfajores con el glasé y dejarlos secar sobre una rejilla o una placa con papel manteca hasta que estén completamente firmes (idealmente de un día para el otro).
