Aprende a hacer Mazamorra: 7 consejos para una receta exitosa
¡Hola! Sean bienvenidos y bienvenidas a Paulina Cocina. En esta edición traemos una receta bajo el brazo que promete cremosidad y frescura en partes iguales: mazamorra. Se trata de una sopa fría muy tradicional en España, originaria de Córdoba, Comunidad de Andalucía.
¿Pero qué tiene la mazamorra que todos hablan de ella? Aquí se van a enterar. Prepárense para descubrir todos los secretos de esta delicia, desde su origen, hasta cómo prepararla en casa con ese sabor especial que la caracteriza.
Y sí, también te daremos algunos consejos de esos que no fallan para que la mazamorra sea la estrella de la mesa ¡a tomar nota!
Tabla de contenidos
Sobre la Mazamorra
La mazamorra es una sopa fría que tiene como base almendras, pan y ajo. Es similar al ajoblanco, pero con una textura más cremosa y densa. Esta delicia cordobesa es perfecta para esos días en los que el calor agobia y necesitamos algo fresco y ligero, pero con sabor.
Aunque podría parecer un plato humilde que pasa desapercibido, la mazamorra es casi una estrella que forma parte de la gastronomía de la región desde hace siglos, y su receta todavía se transmite de generación en generación.
La mazamorracordobesa no es solo un plato; es una experiencia sensorial. La combinación de las almendras con el pan crea una crema suave y delicada, que contrasta perfectamente con el toque de ajo y el frescor del vinagre. Además, la guarnición tradicional de huevo duro y jamón serrano añade un toque de color y sabor que eleva este plato a otro nivel.
El origen de la mazamorra
Se dice que la mazamorra cordobesa tiene sus raíces en la cocina romana, donde se preparaba una sopa similar con pan, ajo y almendras y hasta se dice que está emparentada con el famoso salmorejo cordobés.
El nombre “mazamorra” proviene del árabe hispánico maṣammūra, que se refiere a un tipo de comida hecha con pan, probablemente una de las muchas variantes de este plato que se consumían en la época.
Fue durante la ocupación árabe de la península ibérica que esta receta adquirió su forma actual. Cuando los árabes introdujeron nuevas técnicas e ingredientes de cocina como las almendras, que son el alma de este plato.
Con el tiempo, la receta de mazamorra se consolidó como un símbolo de la gastronomía cordobesa, y aunque ha sufrido algunas modificaciones, sigue siendo fiel a su esencia original.
¿Qué tiene la mazamorra? Variantes de la receta cordobesa
Si bien esta sopa fría es una preparación simple, también es versátil. Los ingredientes básicos son almendras, pan, ajo, aceite de oliva, vinagre y sal. Sin embargo, como toda receta tradicional, cada familia tiene su propia versión, con pequeños toques que la hacen única. Algunas de las variantes más comunes son:
Mazamorra cordobesa clásica: La versión más tradicional, con pan blanco, almendras crudas, ajo y un buen chorro de aceite de oliva virgen extra. Esta es la receta que ha pasado de generación en generación, y que sigue siendo la favorita en muchos hogares cordobeses.
Con manzana: Una variante más moderna que incluye manzana en lugar de vinagre, lo que le da un toque dulce y fresco que contrasta maravillosamente con el ajo y las almendras.
Con uvas pasas: Otra variación interesante es la que incluye uvas pasas, que aportan un toque dulce y un juego de texturas en el plato.
Con jamón: El jamón serrano es la guarnición tradicional, aunque algunos prefieren usar jamón ibérico para darle un toque más sofisticado.
Con pimientos: Añadir pimientos asados a esta sopa fría es una forma de darle un toque de color y un sabor ahumado que complementa a la perfección con la suavidad de las almendras.
7 Razones para preparar la receta de mazamorra
Frescura: Al ser una sopa fría, como el gazpacho andaluz, es ideal para combatir el calor del verano. La mazamorra es refrescante y ligera, perfecta para una comida al aire libre o un almuerzo ligero.
Textura cremosa: La combinación de almendras y pan crea una crema suave y aterciopelada que se deshace en la boca. Esta textura es una de las razones por las que es tan apreciada.
Sabor delicado: Aunque el ajo le da un toque de sabor, la mazamorra es un plato suave en el que el sabor de las almendras es el protagonista.
Versatilidad: Como mencionamos antes, esta sopa admite muchas variantes. Se le pueden añadir frutas, como manzana, banana o mango, para una mazamorra dulce; o trozos de aguacate (palta) y salmón ahumado, para una versión más sofisticada.
Sencilla de preparar: Aunque pueda parecer un plato sofisticado, se trata de una receta fácil de hacer. No requiere de técnicas complicadas ni de ingredientes difíciles de conseguir.
Saludable: La mazamorra es un plato liviano, pero rico en nutrientes. Las almendras aportan grasas saludables, mientras que el ajo y el aceite de oliva son conocidos por sus propiedades beneficiosas para la salud.
Apta para vegetarianos: Si se prepara con pan sin gluten y se omite el jamón en la guarnición puede ser un plato apto para vegetarianos y para personas con intolerancias alimentarias.
7 Consejos clave para preparar mazamorra de almendras
Usar almendras sin piel: Se trata del ingrediente principal. Lo ideal para esta preparación es que sean almendras sin piel, ya que esto le dará una textura más suave y mejor sabor.
No exagerar con el ajo: Aunque el ajo es importante, no debe dominar el plato. Usar un diente pequeño o medio diente si se prefiere un sabor más suave.
Elegir un buen aceite de oliva: El aceite de oliva es otro de los ingredientes clave, por lo que es importante que sea virgen extra para darle a la mazamorra cordobesa un sabor intenso y un aroma delicioso.
Controlar la cantidad de vinagre: El vinagre es el ingrediente que aporta acidez y frescor, pero ojo con pasarse. Añadirlo poco a poco y probar hasta encontrar el equilibrio perfecto.
Dejar reposar: La mazamorra de almendras mejora si se deja reposar en la nevera (heladera) durante un par de horas. Esto permite que los sabores se mezclen y se potencien, logrando un plato más equilibrado y sabroso.
Acompañamientos: Esta sopa fría se suele servir con huevo duro, aceitunas o jamón serrano. Sin embargo, se puede experimentar con otros acompañamientos, como uvas, almendras tostadas e incluso un chorrito de aceite de trufa para darle un toque gourmet.
Ajustar la consistencia: Si al final de la preparación la sopa queda muy espesa, se puede añadir un poco de agua fría o incluso un poco de leche de almendras para aligerarla. Pero tener en cuenta que la consistencia debe ser cremosa, no líquida.
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Receta de mazamorra de almendras
Rinde: 4 porciones
Tiempo de preparación: 15 minutos
Tiempo de reposo: 1 hora
Ingredientes
200 gramos de almendras crudas sin piel
200 gramos de pan blanco (preferentemente del día anterior)
Cortar el pan en trozos pequeños y colocarlos en un bol con agua fría. Dejar reposar unos minutos hasta que el pan esté bien empapado y suave. Luego, escurrirlo ligeramente para eliminar el exceso de agua.
En una licuadora o procesadora colocar las almendras crudas y el diente de ajo pelado. Triturar hasta obtener una pasta fina y homogénea. Es importante que las almendras estén bien trituradas para lograr una textura cremosa.
Incorporar el pan escurrido y el vinagre a la licuadora con la pasta de almendras y el ajo y sumar de a poco el aceite de oliva, hasta que todos los ingredientes estén bien triturados y se forme una crema suave.
Si la mezcla está muy espesa se puede añadir el agua fría poco a poco mientras se sigue triturando, hasta alcanzar la consistencia deseada. Siempre recordando que la mazamorra debe ser cremosa, pero no demasiado líquida.
Agregar sal a gusto y mezclar bien para que los sabores se integren. Llevar a refrigerar antes de servir, al menos por una hora.
Servir con almendras tostadas por encima, huevo duro y aceitunas (opcional).
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